La Música en la Fiesta Electoral

El primer tiempo está por terminar en la lid electoral hacia palacio. Quedó atrás, el chongo, el circo barato, los dardos venenosos, las cortadas de pelo, los chicotazos, la agarrada de boloñas. Las aguas se calmaron; las calles del Perú quedaron más sucias que la conciencia de muchos políticos.
Ollanta Humala seguirá cantando: Nadine, soy el número uno.

PPK dará concierto en palacio con la flauta o cantará, New York, New York, de Frank Sinatra, pero allá en los Unites, usando su passport americano.

Alejandro Toledo repetirá la canción amor, amor o el pueblo le dirá: coje tus "chivas" y arranca no más "cholito",

 Keiko Fujimori moverá sus burdas caderas con "el baile del chino" o el rock de la cárcel, a lado de su papi, el reo Alberto Kenya.

 Y por último, Luis Castañeda zapateará (de rabia) al ritmo de: yo soy chiclayano.

A las cuatro de la tarde de hoy, con el resultado a boca de urna, varios tendrán cara de cachaco; otros cara de poto; unos se harán los "gringos" silbando bajito; muchos exclamarán: nos hicieron el cholito; pero la mayoría observando el panorama de terror, se quedarán "mudos" y se marcharán a llorar a otra parte. 

¡Que viva la fiesta democrática!